Este año celebramos el Día Mundial de la Alimentación de una manera muy especial. Con la presentación de nuestro proyecto GOSA de comedores ecológicos, un trabajo colectivo y coordinado entre entidades de Canarias, Madrid y Valencia para hacer llegar alimentos ecológicos a los centros públicos educativos.
En concreto, tratamos de implementar un menú basado en productos ecológicos, locales y de temporada en comedores de 15 centros públicos educativos presentes en las tres comunidades autónomas involucradas. Y para hacer esto posible, trabajamos también en la creación de una red local y supraautonómica de producción ecológica capaz de abastecer de un volumen constante de productos a todos los comedores educativos públicos.
El Grupo Operativo Supra Autonómico “Alimentación Pública Sostenible 4.0”, conocido como proyecto GOSA, lo formamos instituciones públicas como el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA) y la Universidad de La Laguna, entidades de la economía social como Buscándome las Habichuelas S.L.U, y organizaciones de la sociedad civil como la ONGD Centro de Estudios Rurales y de Agricultura Internacional (CERAI) o el Observatorio para una Cultura del Territorio (OCT). Y este proyecto no sería posible sin el apoyo del Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (FEADER) y del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a través del Fondo Nacional de Desarrollo Rural (PNDR).
Un esfuerzo colectivo
El proyecto GOSA es fruto de un esfuerzo colectivo y coordinado entre diferentes entidades por alcanzar un objetivo común, el de mejorar la alimentación de nuestra población joven, así como las condiciones de los y las agricultoras ecológicas que operan en nuestro país. Cada una de las iniciativas desarrolladas en las tres comunidades autónomas tiene unas peculiaridades.
En las Islas Canarias, contamos con 7 años de experiencia previa gracias al Programa “Ecocomedores de Canarias”, que gestiona el ICCA. Allí ya hay más de 50 comedores escolares que ofrecen una dieta nutricionalmente equilibrada basada en alimentos ecológicos y de proximidad a una comunidad de casi 11.000 comensales. Una iniciativa de éxito, que ya aglutina a más de un centenar de productores/as -casi un 10% del sector presente en las islas- y que supone un punto de partida privilegiado desde el que seguir expandiendo esta red de ecocomedores públicos.
Por su parte, en Madrid estamos desarrollando, a través del OCT, la puesta en marcha de un proyecto piloto en comedores y cafeterías de 3 universidades públicas madrileñas (Universidad Autónoma de Madrid, Universidad Politécnica de Madrid y Universidad de Alcalá de Henares), que beneficiará de manera directa a más de 3.200 personas, entre comensales y productores/as.
Y, por último, en la Comunidad Valenciana, en el CERAI trabajamos en la implementación de La Ecotira, una central logística de productos ecológicos dentro del complejo de Mercavalencia, que nos permitirá regularizar la producción de alimentos ecológicos así como organizar los pedidos para adaptarnos a las necesidades de los comedores y la restauración colectiva.
El cambio de modelo alimentario es posible
El proyecto GOSA nace de un sueño común: hacer posible el cambio de modelo agroalimentario. Una transformación hacia un sistema más sostenible que pasa por impulsar el producto ecológico local.
En este sentido, las instituciones públicas son una herramienta muy importante por su gran capacidad de compra -la contratación pública en España supone el 20% del PIB- pero también por su papel ejemplificante. Por eso creemos que la manera más eficaz de conseguir dar este impulso al mercado hacia la sostenibilidad es centrándonos en la restauración pública colectiva.
Y para hacer llegar este producto ecológico, local y de temporada a los comedores públicos, es imprescindible promover una producción planificada y orientada que garantice el abastecimiento constante de productos y que, al mismo tiempo, mejore las condiciones del sector ecológico en España, líder a nivel europeo en cuanto a hectáreas de producción (2 millones de hectáreas).
Y por último, para conferir aún más sentido a este proyecto GOSA -del que las entidades que lo conformamos nos sentimos orgullosas- este cambio hacia otra manera de alimentarnos empieza en los colegios, institutos y universidades. La alimentación forma ahora también parte de ese aprendizaje que reciben nuestros/as jóvenes, que son una pieza clave en este cambio global, ya que serán quienes marcarán el futuro de nuestro modelo agroalimentario y del planeta.